¿Es posible habilitar a través del arte otros modos de atención y de vínculo con lo que nos rodea?
Este sábado Agustín Rodríguez presenta en Ferrowhite “Un espejo de barro”, un kamishibai que trata sobre la relación de nuestra ciudad con el mar.
En japonés, Kamishibai quiere decir “teatro de papel”, una forma de contar cuentos con dibujos muy popular en aquella nación insular. Bajo este formato, “Un espejo de Barro” narra, en primera persona, las transformaciones históricas sucedidas en el territorio de la Bahía Blanca, a la vez que reflexiona sobre la experiencia compartida por los integrantes del proyecto de viajes exploratorios Isla Invisible.
